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El Cnil solicitó, el 31 de julio de 2012, examinar los datos guardados por el grupo de motores de Google, como parte de su programa Street View. Se recordará que durante los controles realizados en 2009 y 2010, la Comisión había observado que la empresa Google estaba recogiendo, desde sus vehículos dedicados al servicio Street View, datos sobre redes Wi-Fi. De hecho, estos controles habían revelado varias deficiencias, en particular la captura, sin el conocimiento de las personas interesadas, de los llamados datos de «contenido» (nombres de usuario, contraseñas, datos de conexión, intercambios de correo electrónico).

 

Estos hallazgos llevaron a la CNIL a imponer una multa de 100 000 € a Google. Tras esta decisión, la empresa Google le había comunicado, en junio de 2011, que procedió a la destrucción de los datos recogidos de forma ilícita. Sin embargo, mediante carta fechada el 27 de julio de 2012, Google notificó a la Comisión y otras autoridades europeas de protección de datos que todavía estaba en posesión de algunos de los datos de «contenido» recopilados por los automóviles de Street View. Luego se disculpó.

 

Al igual que su homólogo británico, «la Comisión ha pedido a Google que ponga a su disposición los datos en cuestión y que los almacene de forma segura durante el tiempo necesario para llevar a cabo todas las investigaciones necesarias».

Grégory Damy , abogado de derecho de las nuevas tecnologías Niza 2022